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Garnica, compromiso real con la reducción de la huella de carbono

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Desde el 1 de enero de 2022 todos los centros de trabajo de Garnica en España consumen energía eléctrica de origen 100% renovable.

Desde que en Garnica adquiriéramos el firme compromiso de reducir nuestra huella de carbono, la compañía ha ido incorporando en los últimos años a todas sus plantas el registro de la huella de carbono gestionado por la Oficina Española del Cambio Climático. Y gracias todo el esfuerzo, desde el 1 de enero de 2022 todos los centros de trabajo de Garnica en España consumen energía eléctrica de origen 100% renovable. Esto se suma a que la energía calorífica necesaria para el proceso productivo ya se venía generando de manera sostenible, a partir de biomasa. Ambas medidas hacen que actualmente más del 95% de la energía total que se consume en nuestros centros de trabajo sea de origen renovable.

La disminución en nuestra huella de carbono viene dada por este consumo eléctrico. A partir de 2018 empezamos a consumir un mix eléctrico “más renovable”, donde nuestro factor de emisión de gases de efecto invernadero disminuyó notablemente. Esto nos ha permitido ir reduciendo progresivamente el CO2 equivalente (tCO2eq), una unidad de medida que calcula la emisión de todos los gases de efecto invernadero, que, en este caso, para poder medirlos, están relativizados frente a la facturación de la empresa.

  2018 2019 2020 2021
tCO2eq /€m. turnover 98 73 69 44

La huella de carbono corporativa es un indicador ambiental que refleja la totalidad de gases de efecto invernadero (GEI) emitidos en un centro de trabajo, tanto de manera directa como indirecta. Se mide en masa de CO2 equivalente, de manera que puede ser un indicador objetivo y comparable. Conocer la huella de carbono de una organización es el primer paso para establecer una estrategia para reducir o compensar las emisiones.

En el caso concreto de Garnica, la emisión de estos gases de efecto invernadero está calculada para todos los centros de trabajo del Grupo, con alcances 1 y 2, es decir, los combustibles que se queman en el centro de trabajo para producir energía o para el transporte dentro de la fábrica y el consumo eléctrico.

Por tanto, todos estos esfuerzos por parte de la compañía responden a nuestras políticas ESG de responsabilidad social y se inscribe en nuestro compromiso de velar por la eficiencia ambiental de toda nuestra actividad, pues queremos seguir creciendo de forma responsable a través de modelos económicos sostenibles para avanzar hacia una economía circular.

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